El propietario de la red de centros comerciales, CBL & Associates Properties Inc., que posee el Centro Comercial del Valle Imperial, se declaró en bancarrota debido a la pandemia que ha impactado a los minoristas de todo el mundo, así como a sus prestamistas, que intentaron incautar los pagos del alquiler justo cuando la empresa llegaba a un acuerdo de reducción de deuda para ayudarla a sobrevivir.
De acuerdo a un reporte de Bloomberg, la declaración de bancarrota fue presentada ante la corte federal de Houston a finales de octubre e incluye una propuesta de canje de deuda por capital que entregaría a los tenedores de bonos no garantizados una participación del 90 por ciento de CBL a cambio de recortar alrededor de mil 400 millones de dólares en deuda, según documentos judiciales a los que tuvo acceso el medio informativo.
CBL presentó una demanda contra Wells Fargo & Co. , el agente que representa a los prestamistas principales, en la que solicita a un juez dictaminar que las acciones del banco en los días previos al caso de quiebra no eran válidas.
La disputa obligó a CBL a acelerar la presentación de su caso de quiebra en lugar de negociar un acuerdo más amplio para ayudar al propietario de los centros comerciales a lidiar con las pérdidas de alquiler relacionadas con Covid-19, informó Bloomberg con base en documentos judiciales.
Más de 30 de sus inquilinos han solicitado protección judicial este año.
CBL también ha solicitado a un juez que le permita gastar el efectivo que Wells Fargo tiene como garantía por mil 100 millones de dólares en préstamos.
De acuerdo al medio, es probable que esa solicitud sea la primera de una serie de batallas entre CBL y Wells Fargo y los prestamistas.
El propietario del centro comercial, de Chattanooga, Tennessee, reportó una deuda por 4 mil 500 millones de dólares con los acreedores. Previo a la declaración de quiebra, CBL había advertido a los accionistas que se declararía en quiebra si no lograba obtener el alivio de la deuda.
La empresa intentó llegar a un acuerdo con los prestamistas bancarios. Cuando eso no funcionó, recurrió a los tenedores de bonos y finalmente firmaron un acuerdo de apoyo a la reestructuración con inversionistas que poseen el 62 por ciento de los mil 400 millones de dólares de la compañía en pagarés no garantizados, reportó el asesor financiero de la compañía Mark A. Renzi en documentos judiciales.
Según ese acuerdo, los tenedores de bonos no garantizados obtendrán el 90 por ciento de CBL reorganizado y casi 50 millones de dólares en efectivo a cambio de extinguir sus bonos.
CBL emplea a unas 500 personas y tiene alrededor de 7 mil 400 inquilinos ubicados en más de 100 propiedades, la mayoría de las cuales son de propiedad o copropiedad.
La empresa fue fundada en 1978 por Charles B. Lebovitz y cinco socios. Desde esa fecha, la empresa ha sido dirigida por la familia Lebovitz, que se mantiene entre los principales accionistas.
Según el acuerdo con los tenedores de bonos, los accionistas obtendrían el 10 por ciento de la empresa reorganizada.
Algunos de los principales inquilinos de CBL, incluidos JC Penney Co. y la matriz de Ann Taylor, Ascena Retail Group Inc. , ya se declararon en bancarrota este año con planes de cerrar tiendas, agregó Bloomberg.
Los analistas han esperado durante mucho tiempo una reorganización en los centros comerciales y centros comerciales que prestan servicios a las áreas menos prósperas, que dominan la lista de CBL.
CBL advirtió previamente a los inversores que estaba en problemas debido a que los inquilinos no estaban pagando el alquiler.